Técnicas más utilizadas en la terapia respiratoria
Actualmente existen distintos tipos de técnicas durante la terapia respiratoria.
El especialista indicará cual es la más adecuada según la patología previa que presente y el estado en el que se encuentra el paciente.
Técnicas de variación de flujo
Existen diferentes técnicas de variación de flujo, pueden ser espiratorias o inspiratorias y se usan para el drenaje de secreciones bronquiales o reclutamiento alveolar.
Entre las técnicas más usadas encontramos el AFE (aceleración del flujo espiratorio), ELPr (espiración lenta prolongada) o EDIC (ejercicios de débito inspiratorio controlado), entre otras.
Manejo de la tos, tos asistida o tos controlada
Se realiza para el manejo de las secreciones y para facilitar la expulsión de la secreción por el mecanismo de la tos. Se puede hacer de manera activa, asistida o controlada al paciente con una serie de pasos. Se recomienda hacerlo durante dos o tres veces para que pueda arrastrar las secreciones de forma eficaz.
En pacientes con patologías neuromusculares se realiza el manejo de las secreciones a través del Cough Assist o también llamado tosedor, el cual entre la colaboración del médico prescriptor del equipo y el fisioterapeuta valoran cuales son los parámetros óptimos para aumentar ventilación pulmonar, manejo de secreciones o en caso de atragantamiento
Ejercicios de ventilación diagrafagmática
Para mejorar la oxigenación del organismo e incrementar la función respiratoria, el fisioterapeuta puede recomendarle realizar una serie de ejercicios respiratorios. Además, favorece la capacidad ventilatoria, disminuye la sensación de disnea ante esfuerzos o actividades de la vida diaria.
Uso de tecnología respiratoria
Además de realizar técnicas, en muchas ocasiones los fisioterapeutas abordan el tratamiento con la ayuda de nebulizadores, cámaras de inhalación… para preparar la vía aérea superior e inferior antes de la sesión de fisioterapia respiratoria. Gracias a estos dispositivos se consigue que las vías aéreas estén menos obstruidas y tanto el fármaco como las técnicas sean más eficaces.
Además, también a través de equipos como ventilación mecánica y oxígeno se puede realizar un entrenamiento aeróbico en pacientes con patologías respiratorias crónicas para intentar mantener o mejorar las actividades de la vida diaria y la disnea. Siempre el ejercicio debe ser controlado por un fisioterapeuta respiratorio a través de la pulsioximetría.